En este X Simposio tendremos la interesante ponencia de Guillermo Sullings, autor del libro Encrucijada y futuro del ser humano, los pasos hacia la Nación Humana Universal quien, desde su área de especialización, la economía política humanista presentará una alternativa de economía humanista planetaria.
Nos dice al respecto que, ante un problema global, la solución debe ser global o no será. Si pensamos que, en este momento de la historia, la aceleración de la crisis planetaria puede generar un vacío del que surja la necesidad de una civilización planetaria humanista, pues entonces, desde el punto de vista económico, debiéramos pensar en términos de una Economía Planetaria Humanista.
Pero un sistema económico no se define solamente por sus métodos productivos, sino fundamentalmente por la organización social que lo sustenta, en base a un sistema de valores que motivan y ordenan a la población. Hoy vemos como poco a poco el Dios Dinero fue ocupando el centro de la escena y se convirtió en el valor central de las sociedades. La mecánica capitalista de acumulación de la riqueza posicionó a una nueva “nobleza” en el poder, y las democracias se fueron transformando en verdaderas plutocracias.
¿Cuál será la crisis terminal de este sistema que acelerará el despertar de las poblaciones? ¿Será un conflicto nuclear, una crisis financiera sin precedentes, un caos social inmanejable, o un desastre ecológico mayúsculo? ¿tal vez todo junto?
Nos encontramos en una encrucijada, no se puede seguir creciendo a expensas de la depredación planetaria, pero por otra parte hay vastos sectores de la población mundial que necesitan desarrollarse, y la única solución posible (salvo que aceptemos el exterminio de media humanidad), es la de redistribuir los recursos a nivel global. Solo se podrá salir de esta encrucijada mediante un verdadero salto de la humanidad hacia un cambio cultural que ponga al ser humano en contacto con sus más elevados valores y sus profundas aspiraciones.
El Instituto Humanizar presentará una producción colectiva donde expondrá la propuesta de construcción de una sociedad humanista como un nuevo horizonte para una democracia real con vigencia plena de los derechos humanos. En un mundo cada vez más desigual, donde el acceso a los derechos fundamentales está condicionado por el poder económico, se hace imperativo repensar nuestras estructuras políticas y sociales. ¿Es posible un modelo de sociedad que realmente garantice el bienestar de todos los seres humanos? En esta presentación estará a cargo de Lía Méndez, Gabriel Bulgach y Jorge Pardés.
En el marco de la crisis de representatividad en las democracias actuales lejos de ser el medio a través del cual el pueblo gobierna, han dejado de responder a las necesidades de la mayoría. Los representantes electos, una vez en el poder, se distancian de aquellos que los eligieron y terminan actuando en función de intereses particulares, ajenos al bienestar común.
Este modelo, que otorga un "cheque en blanco" a los gobernantes durante sus mandatos, perpetúa la desconexión entre las decisiones políticas y las verdaderas demandas sociales. Para revertir esta situación, es necesario implementar mecanismos de participación directa, como consultas populares y referendos vinculantes, que otorguen al pueblo una voz real en las decisiones que afectan su presente y futuro.
El acceso a los derechos fundamentales, como la salud, la educación, la vivienda y el trabajo, está condicionado por un sistema de mercado que privilegia el lucro sobre la vida humana. Esta mercantilización de la vida perpetúa las desigualdades, condenando a amplios sectores de la población a la pobreza y la exclusión social.
La propuesta de una organización social humanizadora, busca revertir esta situación mediante la implementación de políticas públicas que prioricen el bienestar de la población sobre las ganancias económicas. La renta básica universal, la nacionalización de sectores estratégicos y la inversión en salud y educación son algunas de las medidas clave para garantizar que todos los seres humanos puedan disfrutar de una vida digna.
Otro de los grandes desafíos de nuestro tiempo es el control que las grandes corporaciones ejercen sobre los medios de comunicación. Estos medios, dominados por el capital financiero, juegan un rol crucial en la construcción de sentidos. Las narrativas que promueven, legitiman el statu quo y dificultan la organización social necesaria para el cambio.
El camino hacia la Nación Humana Universal requiere la democratización de la comunicación. Esto implica regular el uso de los algoritmos y la inteligencia artificial para ponerlo al servicio del desarrollo humano y no de los intereses de los que detentan el poder, asegurando que todos los pueblos tengan acceso a una información veraz y plural y en la que la libertad de expresión no sea solo una potestad de los medios de comunicación.
El camino hacia la Nación Humana Universal, implica un modelo de sociedad donde el progreso sea para todos, sin exclusiones. En este modelo, los derechos humanos no son meras aspiraciones, sino realidades efectivas que guían el desarrollo social y económico. Solo a través de un modelo de sociedad humanista, que realmente priorice la vida humana por sobre los intereses del mercado, podremos construir un futuro donde todos los seres humanos vivan en condiciones de igualdad y dignidad.
La crisis actual nos ofrece una oportunidad única para reimaginar nuestras estructuras políticas y sociales. Poniéndolas al servicio de los derechos humanos, donde la democracia sea real y el bienestar de todos sea el centro de las políticas públicas. Esta utopía en marcha es una posibilidad concreta que puede transformar el mundo y abrir el camino hacia un futuro más justo y equitativo.
Teremos uma apresentação inovadora neste X Simpósio sobre Cidade Do Futuro, instrumento político formado no início de 2013 na cidade de Rosário, a partir da confluência de dois movimentos sociais autônomos da cidade, o movimento Giros e o Movimento 26 de Junho, movimentos sociais que são referenciados na tradição das experiências pós-2001.
Apresentarão em concreto o método de construção política que tem, segundo sua experiência, um poder de convicção muito maior do que dar uma discussão política em abstrato. Eles nos dizem que, para construir um mundo onde cabem muitos mundos, precisamos convidar e convencer que existe uma maneira diferente de gerenciar educação, cultura, produção, marketing, organização comunitária. Nosso trabalho propõe uma forma de fazer isso.
Contarão a experiência de construção desse chamado "partido do movimento" que é Cidade Do Futuro, cujo objetivo não é apenas representar nas instituições do Estado, mas ser uma expressão materializada da sociedade em movimento.
É um instrumento político onde:- projetos territoriais,- escolas,- cantinas/casas comunais,- espaços culturais,- unidades produtivas, marketing,- mídia, - mandatos populares no Conselho municipal de Rosário e outras localidades da província de Santa Fé, e políticas prefigurativas de escala, como a urbanização de Nuevo Alberdi ou a empresa pública de alimentos coexistem.
Todos esses projetos convivem no mesmo instrumento porque há uma hipótese de construção política por trás disso: esse processo crítico de desafeto que a sociedade tem com a política deve ser suturado de alguma forma. Isso é feito de baixo para cima, aproximando a tomada de decisões de onde essas decisões têm impacto e vinculando os problemas do cotidiano à política. Buscamos captar no presente pedaços daquela cidade e daquela sociedade que queremos para o amanhã.
Todos concordamos que existe um modelo injusto de produção de alimentos, que a educação é importante, que a cultura é fundamental, etc, mas poucos podem dizer o que é um modelo justo ou como seria. É aí que Ciudad Futura nos mostra em menor escala, através de uma prática prefigurativa e concreta, que existe um modelo diferente.
Este trabalho será apresentado por Epifan Mitsuba Estefan Mitsuba Bianco e Alejandro Gelfuso. Estefan Mitsuba é membro do Ciudad Futura. Coordenador Territorial da futura circunscrição do centro da cidade. Coordenador das escolas de formação da Fundação cidades sem medo-Cidade Do Futuro. Alejandro é membro do Ciudad Futura. Fatos-Mídia Cidade Do Futuro. Coordenador Provincial de desenvolvimento da Cidade Do Futuro. Licenciatura em Comunicação Social UNR. Doutor em Ciência Política.
Avremo una presentazione innovativa in questo X Simposio sulla Città futura, uno strumento politico formato all'inizio del 2013 nella città di Rosario, dalla confluenza di due movimenti sociali autonomi della città, il Movimento Giros e il Movimento 26 de Junio, movimenti sociali a cui si fa riferimento nella tradizione delle esperienze post-2001.
Essi presenteranno il metodo di costruzione politica in concreto che ha, secondo la loro esperienza, un potere di convinzione molto maggiore che dare una discussione politica in astratto. Ci dicono che per costruire un mondo in cui molti mondi si adattano, dobbiamo invitare e convincere che esiste un modo diverso di gestire l'istruzione, la cultura, la produzione, il marketing, l'organizzazione della comunità. Il nostro lavoro propone un modo per farlo.
Racconteranno l'esperienza della costruzione di questo cosiddetto ”partito del movimento" che è Città Futura, il cui obiettivo non è solo quello di rappresentare nelle istituzioni statali, ma di essere un'espressione materializzata della società in movimento.
È uno strumento politico in cui coesistono:- progetti territoriali,- scuole,- mense/case comunali,- spazi culturali,- unità produttive, marketing,- media, - mandati popolari nel consiglio comunale di Rosario e in altre località della provincia di Santa Fe, e politiche prefigurative di scala come l'urbanizzazione di Nuevo Alberdi o l'Azienda alimentare pubblica.
Tutti questi progetti coesistono nello stesso strumento perché dietro c'è un'ipotesi di costruzione politica: questo processo critico di disaffezione che la società ha con la politica deve essere in qualche modo suturato. Questo viene fatto dal basso verso l'alto, portando il processo decisionale più vicino a dove queste decisioni hanno impatto e collegando i problemi della vita quotidiana con la politica. Cerchiamo di catturare nei pezzi presenti di quella città e di quella società che vogliamo per domani.
Siamo tutti d'accordo sul fatto che esiste un modello ingiusto di produzione alimentare, che l'istruzione è importante, che la cultura è fondamentale, ecc., ma pochi possono dire cos'è un modello equo o come sarebbe. È qui che Ciudad Futura ci mostra in scala ridotta, attraverso una pratica prefigurativa e concreta, che esiste un modello diverso.
Questo articolo sarà presentato da Epifanía Estefanía Bianco e Alejandro Gelfuso. Estefanía è membro di Ciudad Futura. Coordinatore territoriale della circoscrizione del Futuro centro città. Coordinatore delle Scuole di Formazione della Fondazione Città Senza Paura-Città Futura. Alejandro è membro di Ciudad Futura. Fatti-Media Città futura. Coordinatore provinciale per lo sviluppo di Future City. Laurea in Comunicazione Sociale UNR. Dottorato in Scienze Politiche.
Nous aurons une nouvelle présentation dans ce Symposium X sur Futura City Un instrument politique formé au début de 2013 dans la ville de Rosario, de la confluence de deux mouvements sociaux autonomes de la ville, du mouvement Giros et du mouvement du 26 juin, social Mouvements référencés dans la tradition des expériences post-2001.
Ils présenteront la méthode de construction politique spécifique qui a, selon leur expérience, un pouvoir de conviction beaucoup plus que de donner une discussion politique dans le résumé. Ils nous disent que pour construire un monde où de nombreux mondes, nous devons inviter et convaincre qu'il existe une façon différente de gérer l'éducation, la culture, la production, le marketing, l'organisation communautaire. Notre travail propose un moyen de le faire.
Ils compteront l'expérience de construction de cette «partie de mouvement» ainsi appelée qui est une future ville, dont l'objectif est non seulement de représenter dans les institutions de l'État mais d'être une expression matérialisée de la société en mouvement.
Il s'agit d'un instrument politique où ils coexistent: - projets territoriaux, -escueas, -comadores / maisons communautaires, espaces culturels, province de Santa Fe et des politiques à l'échelle préfigurative telles que l'urbanisation de Nuevo Alberdi ou la société d'alimentation publique.
Tous ces projets vivent dans le même instrument car derrière il y a une hypothèse de construction politique: à ce processus critique de désaffection que la société a avec la politique doit être suturé d'une manière ou d'une autre. Cela se fait de bas en haut, en prenant des décisions où ces décisions ont un impact et liant les problèmes de la vie quotidienne à la politique. Nous cherchons à capturer dans les pièces actuelles de cette ville et cette société que nous voulons demain.
Nous convenons tous qu'il existe un modèle injuste de production alimentaire, que l'éducation est importante, que la culture est fondamentale, etc., mais peu peuvent dire ce qu'est un modèle juste ou ce qui serait. C'est là que Ciudad Futura nous montre à plus petite échelle, grâce à une pratique préfigurative et concrète, qu'il existe un modèle différent.
Cet article sera présenté par Epiphany Estefanía Bianco et Alejandro Gelfuso. Estefanía est membre de la ville de Futura. Coordinateur territorial de la circonscription Centro de Ciudad Futura. Coordinateur des écoles de formation de la Fondation des villes sans crainte de villes. Alejandro est membre de Ciudad Futura. Faits - Moyen de communication Ciudad Futura. Coordinateur du développement provincial de Ciudad Futura. Baccalauréat en communication sociale Unr. Doctorat en science politique.
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Ouverture et imagination : l'avenir de l'humain vers la liberté et l'indétermination
Bonjour à tout le monde. Je tiens à remercier les nombreuses personnes qui ont rendu possible la tenue de ce symposium, sous cette nouvelle forme interconnectée.
Mon intervention porte sur l'être humain, en mettant en évidence certaines caractéristiques qui différencient son fonctionnement psychique et sa relation avec l'environnement qui l'entoure. De cette façon, je voudrais arriver à la conclusion que l'être humain, en tant qu'individu et en tant qu'espèce, est constitué pour être capable de créer de nouvelles réalités, en changeant les conditions dans lesquelles il agit : il, ou plutôt NOUS, sommes capables de créer non seulement un nouveau monde mais aussi un nouvel être humain.
Parler de l'être humain, ce n'est pas uniquement en débattre comme si c'était un objet d'étude philosophique, ou s'il s'agissait d'une entité naturelle à observer depuis l'extérieur. Au contraire, j'invite chacun et chacune d'entre nous à se connecter au discours, car je parlerai de chacun d'entre nous, de notre expérience quotidienne, de notre vie intérieure, de la façon dont nous percevons et articulons notre existence.
Pour cela, je vais me poser quelques questions, à partir desquelles je commencerai à dérouler les nombreux éléments dont j'ai besoin pour arriver à la conclusion.
Comment l'être humain entre-t-il en relation avec l'environnement ? En d'autres termes, comment la conscience entre-t-elle en contact avec le monde et comment ce contact se manifeste-t-il ?
Dans quelle mesure la capacité à créer des images mentales oeuvre-t-elle pour l'évolution ?
En quoi le passé me concerne-t-il ? En quoi le futur me concerne-t-il ?
Quel degré de liberté puis-je obtenir par rapport à ce qui me limite aujourd'hui dans ma vie ?
Mes réponses ont trouvé leurs racines dans l'œuvre de Silo 1 , le pseudonyme littéraire de Mario Rodriguez Cobos, penseur argentin et fondateur du courant de l'Humanisme Universaliste, qui a également conçu ce symposium en 2008. Je suis également redevable aux contributions de tous les chercheurs qui ont approfondi les nombreux thèmes qu'il a abordé.
DÉVELOPPEMENT
Je vais donc entrer au cœur du sujet. La première question est la suivante : comment l'être humain entre-t-il en relation avec l'environnement ? Autrement dit, comment la conscience entre-t-elle en contact avec le monde et de quelle manière ce contact se manifeste-t-il ?
J'utilise ici le mot "conscience" dans un sens psychologique et non moral. Par le mot "conscience", j'entends l'appareil interne qui nous fait percevoir le monde extérieur et organise les réponses que nous donnons à ce monde extérieur. La conscience fait un énorme travail : parce qu'elle reçoit continuellement des données de tous les sens externes et internes, elle les élabore et les combine avec les données de la mémoire et elle programme des actions. La conscience a pour but de maintenir l'homéostasie (équilibre) du fonctionnement de l'unité psychophysique dont elle est l'expression. Et jusqu'à là nous ne sommes pas si différents de notre chat.
Quelle est la nature des élaborations de la conscience ? Que fait exactement notre conscience ? Prend-elle des photos du monde extérieur, puis joue-t-elle avec ces représentations et, à la fin du jeu, propose-t-elle une action à réaliser ? Dans cette perspective, la conscience ferait-elle une reproduction du monde, comme s'il s'agissait d'une entité passive en face d'elle, et élaborerait mécaniquement des solutions aux problèmes que le monde pose.
C'est n'est pas ainsi : la conscience n'attend pas passivement un quelconque signal du monde extérieur. Comme l'affirment Brentano, Husserl et Silo, la conscience est sans cesse en activité, cherchant sans cesse des objets mentaux, c'est-à-dire des représentations qui complètent au mieux les actes qu'elle a elle-même lancés. Je me représente le monde non pas parce que je le trouve devant moi, mais parce que ma conscience fait un travail continuel de construction active. À l'intérieur de moi-même, je n'ai pas des photos, mais des élaborations originales et uniques. Ce travail continu de construction active que la conscience effectue sur les données en sa possession est si vrai que, même dans le domaine judiciaire, des études sont menées sur la fiabilité des témoignages donnés lors de procès ou interrogatoires, car il existe d'énormes différences entre les récits de personnes qui rapportent le même événement : chacun a construit l'événement d'une manière différente, voir même avec des détails qui étaient absents de la scène à décrire.
Nous sommes donc des constructeurs de la réalité, chacun de sa propre réalité.
Si je n'avais pas en moi des données de perception ou des données de mémoire sur le monde, que resterait-il en moi, comme matériel mental pour faire travailler ma conscience ? Peu de choses : la conscience n'aurait pas de représentations et le monde n'existerait finalement pas pour moi. Et à ce stade, je n'existerais pas non plus, puisque mes élaborations ont une base dans le monde. En d'autres termes, je me constitue, immédiatement, depuis que je suis dans le ventre de ma mère, par rapport au monde dans lequel je vis, compris à la fois comme un monde matériel et social. Ma façon particulière de percevoir est entrelacée avec la façon dont je suis perçu par d'autres êtres comme moi, et j'interagis avec un monde qui n'existe que dans la mesure où je peux en saisir les aspects saillants pour ma vie, pour les sens et la conscience. Je construis la réalité de mon monde, et je peux le faire grâce aux éléments du monde qui me sont accessibles. Je suis, en définitive, une structure conscience-monde en perpétuelle activité. La frontière entre moi et le monde extérieur, que je peux aussi situer physiquement dans la limite tactile de la peau, est, au niveau de la représentation, une frontière élastique, ou plutôt théorique, définissable comme une communication entre des espaces ouverts. Silo explique ce concept à l'aide du terme "paysage" : il existe un paysage interne, donné par toutes mes représentations mentales, et un paysage externe, le monde tel que je peux le percevoir, et c'est dans l'entrelacement de ces deux paysages que se déploie ma structure conscience-monde, qui me permet d'apprendre (d'assumer de nouvelles données à partir de l'interaction avec le paysage externe) et d'agir sur le paysage externe par l'action de mon corps, qui y est inclus.
Saisir l'inéluctable étreinte dans laquelle ces deux paysages interagissent continuellement est le résultat d'un entraînement pour saisir un registre interne particulier, celui du regard. Autre concept siloïste, le regard interieur est le registre que nous avons du point d'observation à partir duquel nous voyons fonctionner la conscience et tous ses actes. Tout changement dans le regard se reflète dans la manière dont les paysages réalisent leur action. Cette conscience du regard est très importante si nous voulons changer quelque chose à la situation de violence généralisée dans le monde d'aujourd'hui. Tous les livres de développement personnel du style : "prends ta vie en main" soulignent la capacité humaine de prendre conscience du regard et de le diriger vers la direction souhaitée, ainsi que de nombreux travaux psychothérapeutiques : la prophétie qui s'auto-réalise est l'exemple le plus clair de la manière dont le regard influence nos actions et les événements que nous provoquons.
Le regard intérieur n'est pas seulement le regard de l'individu sur lui-même et ses paysages, mais aussi celui de toute une catégorie de personnes, par exemple les scientifiques. En commençant par les sciences physiques, aujourd'hui, dans tous les domaines de la connaissance, le principe anthropique progresse, c'est-à-dire la prise en compte du rôle de l'observateur dans la construction de la réalité. L'illusion de la connaissance objective est abandonnée au profit d'une perspective qui se concentre sur l'interaction entre l'être humain avec ses moyens épistémiques et le monde à connaître, du niveau microscopique des particules subatomiques au niveau macroscopique de la cosmologie. En prenant en compte le regard de l'être humain, une nouvelle vision de l'Univers émerge, bien plus complexe que celle d'il y a un peu plus de 100 ans : le physicien Carlo Rovelli la définit comme "un monde qui n'existe pas dans l'espace et n'évolue pas dans le temps". Un monde fait uniquement de champs quantiques en interaction dont le fourmillement de quanta génère, par un réseau dense d'interactions réciproques, l'espace, le temps, les particules, les ondes et la lumière"2. Le concept d'interaction devient central dans toutes les sciences. Les catégories épistémiques et leurs limites, qui étaient utiles jusqu'à récemment, empêchent désormais de comprendre la nature de la nouvelle vision qui émerge des connaissances actuelles. Ce que j'ai cru jusqu'à présent doit s'effondrer afin de configurer une nouvelle façon de voir les choses. Face à cette "nouvelle" complexité de mon regard, je me sens comme ont dû se sentir les explorateurs européens du XVIe siècle, confrontés à la découverte de terres jusqu'alors insoupçonnées. Une image du monde à changer complètement. Quel étonnement je ressens en regardant la photo du télescope Hubble qui saisit des centaines de galaxies de l'Univers profond, remettant définitivement en question la perception géocentrique du monde dans lequel j'ai vécu jusqu'à présent. Soudainement, l'Univers est pratiquement infini et se déploie grâce à mon regard qui le capte. La conscience humaine sur cette petite planète périphérique devient importante parce qu'elle représente finalement, pour le moment et selon ce que nous savons, un des niveaux d'interaction possibles et une des manières de construire la connaissance, mais certainement le seul auquel nous avons accès. Cette réflexion touche tous les domaines de la connaissance humaine, qui doivent reconsidérer les fondements épistémiques des disciplines et élaborer un nouveau programme cognitif dans lequel le regard de l'être humain est inclus comme élément central de la méthode.
Deuxième question : Dans quelle mesure la capacité à créer des images mentales oeuvre-t-elle pour l'évolution ?
La dynamique conscience-monde s'exprime à travers l'activité de représentation, c'est-à-dire de production d'images, telles qu'elles sont communément définies en psychologie. Les images sont des re-constructions synthétiques que la conscience produit comme résultat de sa propre activité, elles sont donc originales, uniques, bien que l'éducation et la sociabilité opèrent constamment pour que la communication réciproque des images soit possible. Dès le plus jeune âge et tout au long de notre vie, nous partageons à travers le langage des concepts, c'est-à-dire les significations de base que nous associons à nos images. C'est en effet dans l'échec des actions et de la communication, dans les ambiguïtés, dans les erreurs, que nous rendons compte de la subjectivité de nos images et de nos paysages et cela nous oblige à nous remettre d'accord, à retrouver un consensus sur les croyances pré-dialogiques à la base de nos échanges conversationnels. C'est la nature de notre connaissance, comme l'écrit Edgar Morin : " Toute connaissance comporte le risque de l'erreur et de l'illusion ".3
L'historien Harari parle des "constructions de l'imagination" qui ont habitué les gens depuis leur naissance à se conformer à certains comportements et à penser d'une certaine manière, créant ainsi des "instincts artificiels" que nous appelons culture.4 Les croyances sont des images complexes et prescriptives dont le caractère subjectif est difficile à reconnaître, car la culture a une forme coopérative basée sur les grands nombres et les évidences dont nous disposons sont tout le contraire : ceci est la vérité puisque tout le monde le croit. Heureusement, de nombreux penseurs brillants sont allés à contre-courant, ont remis en question ce qui était considéré comme vrai et ont ainsi permis l'accès à de nouvelles connaissances.
Les images sont flexibles : elles sont continuellement reconstruites, modifiées, mises à jour pour permettre l'adaptation de la structure psycho-physique au monde physique et social, et vice versa d'adapter le monde physique et social selon ses propres désirs. Cette activité d'adaptation mutuelle vise une direction évolutive, puisqu'elle opère à travers l'instrument du corps, à la fois sujet et objet du monde matériel et social, pour transformer les paysages dans le sens du dépassement de la douleur physique et de la souffrance mentale. Cette intention fondamentale de notre espèce nous guide depuis les premiers hominidés, puisque ce sont les mêmes conditions de finitude et de manque qui sont le moteur de l'intention évolutive. Nous pouvons affirmer qu'il s'agit d'une direction implicite dans la Vie elle-même, depuis ses formes les plus simples à ses formes les plus complexes.
Cette direction dans l'être humain agit en articulant dans la conscience un horizon temporel dans lequel le passé, le présent et le futur sont imbriqués les uns dans les autres, mais où finalement prévaut la construction du futur, du fait de la même mécanique intentionnelle de la conscience, toujours tendue vers l'avant à la recherche de nouveaux objets mentaux. Nous appellerons l'activité de représentation dans la direction du futur l'imagination et c'est ce qui permet l'émergence de nouveaux contenus, qui dépassent les anciennes croyances en les rejetant ou en les intégrant dans des visions plus larges. Giordano Bruno a écrit : "Chaque fois, en effet, que nous croyons qu'il reste une vérité à connaître, un bien à atteindre, nous cherchons toujours une autre vérité et aspirons à un autre bien. En somme, le questionnement et la recherche ne se contenteront pas d'atteindre une vérité limitée et un bien défini." 5
Tout ce processus, au niveau de l'individu et de l'espèce, entraîne un changement continuel, et les positions qui prétendent préserver l'équilibre actuel, ou pire encore, revenir à des situations passées que l'on croyait positives à des époques lointaines, sont miopes.
Troisième question :
. En quoi le passé me concerne-t-il ? En quoi le futur me concerne-t-il ?
La temporalité de la conscience découle de l'articulation des trois temps que nous pouvons expérimenter : passé, présent et futur. Le passé, c'est tout ce qui est mémoire, c'est le paysage de formation et il entre toujours en jeu dans la construction de nouvelles images. Le passé me définit, je suis donc un être historique imprégné de la culture où j'ai grandi. Elle me définit également en tant qu'être social, étant donné que c'est dans l'interaction avec les intentions des autres que j'ai configuré ma propre intention. Plus le passé s'accumule dans la mémoire plus il prédomine. Pourtant, c'est le futur qui prévaut : c'est la dimension planificatrice de l'existence, c'est la programmation de mes actions, c'est l'intention qui se manifeste dans le corps et dans le monde. Le présent, est le point de croisement des images provenant de la mémoire et des images résultant des processus imaginatifs dans lesquels je me projette dans des situations futures. C'est dans le présent que j'agis, que je ressens, que je pense, et où j'inclus le passé, alors que je suis poussé vers le futur, élargissant ainsi le regard qui observe la temporalité en action.
Et maintenant la dernière question : quel degré de liberté puis-je obtenir par rapport à ce qui limite ma vie aujourd'hui ?
L'élan vers la futurisation, provenant de la direction évolutive qui veut transformer les conditions données, correspond dans l'histoire humaine à un processus de libération personnel et sociale dans lequel nous sommes, chacun d'entre nous, appelés à apporter notre contribution. Cette libération s'enracine dans le corps avec des actions pour s'éloigner de la douleur et s'approcher du plaisir. Au fur et à mesure que les besoins et les possibilités se sont élargis, les êtres humains ont lutté contre la maladie et la pauvreté, contre la peur qui génère la souffrance. Le corps lui-même peut être transformé dans ce processus de libération : chirurgie, prothèses, procréation assistée ne sont que quelques-unes des façons dont nous intervenons sur le corps lorsqu'il représente une limite à nos intentions.
Le processus de libération de l'être humain ne fait que commencer. Apparu le dernier sur la planète, son évolution a été rapide, et dans une boucle de rétroaction vertueuse, plus il changeait, plus il était capable de changer. La possibilité de la représentation a accéléré encore plus le développement de ses capacités, étant donné qu'il ne devait pas nécessairement procéder par tentatives et erreurs, mais qu'il pouvait imaginer des situations et trouver des solutions.
John Stewart, spécialiste du développement de la conscience, définit deux caractéristiques fondamentales de l'être humain : l'auto-évolution et l'autogestion systémique. La première est la capacité de se libérer des limitations biologiques et culturelles du passé afin de pouvoir choisir ce qui est nécessaire au bénéfice du futur ; la deuxième est la capacité de développer des modèles mentaux d'interaction entre soi et l'environnement, qui permettent d'identifier les actions utiles pour le futur évolutif.6
Ces capacités sont présentes chez tous les êtres humains en tant que possibilités inhérentes au fonctionnement même de la conscience. Mais ce n'est qu'en présence d'un choix intentionnel que nous pouvons en prendre conscience, les développer, les mettre au service de l'amélioration de la vie individuelle et collective. Quel saut qualitatif aura-t-elle la vie humaine et non humaine sur cette planète si chacun agissait pour se libérer des limites imposées à tous les niveaux ?
Ce symposium est un moment de rencontre et de circulation d'idées qui prétendent éclairer une partie du chemin de libération qui nous attend dans le futur. Nous libérer de la tyrannie de l'argent, par exemple, avec un revenu de base universel ; nous libérer de la menace destructrice avec la réduction des armes et l'élimination de l'énergie nucléaire ; nous libérer de l'inégalité entre les sexes et de toutes sortes de discriminations en général ; nous libérer de la menace d'un désastre écologique ; nous libérer de la violence qui affecte tant de domaines de la vie humaine.
Jusqu'où pouvons-nous aller sur le chemin de la libération ? Il est clair que vu d'ici, vu du présent d'où nous observons, nous entrevoyons au loin des bifurcations que nous pourrions prendre et des bifurcations que nous espérons éviter, mais le chemin n'est en rien défini. A partir d'Heisenberg en avant, dans le domaine scientifique (mais avec des conséquences d'importance épistémologique sur toute la connaissance humaine), l'indétermination a décrit de manière plus sensible le comportement non mécanique et non déterministe de certains phénomènes physiques, en étant capable de généraliser cette acquisition aux phénomènes beaucoup plus aléatoires de la vie et de l'être humain.
Pic de la Mirandole décrit de manière poétique cette immense liberté qui s'offre à l'être humain : "Je ne t'ai fait ni céleste ni terrestre, mortel ou immortel, afin que de toi-même, créateur presque libre et souverain, puisses te façonner et te sculpter dans la forme que tu aurais choisie. Tu peux dégénérer dans les choses inférieures, qui sont brutales ; tu peux te régénérer, selon ta volonté, dans les choses supérieures qui sont divines". 7
Il est certain que cette dimension d'indétermination fascine et effraie en même temps. Parfois, elle peut prendre la forme concrète de la question suivante : "Allons-nous nous éteindre ou serons-nous capables de transformer notre espèce et notre environnement d'une manière qui va même au délà de tout ce que nous pouvons imaginer ?" Des abîmes et de brillantes perspectives coexistent comme autant de possibilités à concrétiser.
CONCLUSIONS
La caractéristique de l'être humain est l'ouverture, car sa conscience, en entrelaçant son activité constructive en interaction avec le monde, structure et donne forme à lui- même et au monde. La capacité de créer des images et de les projeter dans le futur dans le but de dépasser la douleur et la souffrance est la base de la transformation des conditions limitées dans lesquelles il agit. La transformation se donne dans le regard avec lequel il observe, dans les paysages intérieurs et extérieurs qui le constituent, dans le monde lui-même. Il a écrit en lui-même, codifié dans son propre fonctionnement, son destin de libération personnelle, sociale et spirituelle.
Tout cela est très important aujourd'hui. Selon Hugo Novotny : "Dans le moment historique actuel, il est devenu impératif que l'espèce humaine assume un rôle de premier plan pour surmonter la crise et passer à la future étape évolutive de la vie sur notre planète ; et pour que cela soit possible, le saut intentionnel vers un nouveau niveau de conscience, vers une nouvelle éthique et une nouvelle spiritualité est impératif."8
Les "choses supérieures et divines" de Pic de la Mirandole et la nouvelle spiritualité de la prochaine étape de l'évolution humaine font référence à la dimension mystique que les êtres humains explorent depuis plusieurs milliers d'années, cherchant la voie vers un nouveau niveau de conscience et de connaissance. Les limites de l'identité individuelle sont des berges dans lesquelles est contenu le registre du moi conscient, mais il existe un fleuve profond qui n'a pas de berges et qui concerne les expériences de contact avec le monde ineffable des significations universelles.
Sasha Volkoff décrit très bien le procedé de méditation pour y parvenir : " À mesure que le silence se fait et que la conscience est vidée de tout contenu, il peut se produire un moment dans lequel, dépourvue de contenu vers lesquels se diriger, la conscience fait un mouvement vers l'intérieur et se registre elle-même, à ce moment- là, lorsque le sujet se rencontre lui-même, la rupture de niveau se produit. A la disparition des objets de conscience, celle-ci se découvre "vide" et se voit elle-même non pas comme objet mais directement comme sujet." 9
L'étape suivante du processus de libération auquel nous aspirons est celle de pouvoir imaginer notre évolution au-delà de la limite de la mort du corps. Dans le mystère et la foi qui accompagnent ce passage, les mystiques de différentes religions ont affirmé la possibilité d'un chemin de l'esprit, au-delà du corps physique, indépendamment du moi avec lequel nous nous identifions dans la vie, se projetant vers un chemin de transcendance.
Je termine par une très belle citation tirée du conte de Silo "L'argile du cosmos" :
" Ainsi, le visiteur espérait une nouvelle naissance de cette espèce en qui il avait reconnu la peur de la mort et le vertige de la furie destructrice. Il avait été témoin du vécu de ces êtres qui vibraient sous l'hallucination de l'amour, qui s'angoissaient face à la solitude du vide de l'univers, qui imaginaient leur futur, luttaient pour déchiffrer les traces du commencement qui les avait vu naître. A un moment donné, cette espèce faite de l'argile du cosmos se mettrait en marche pour découvrir ses origines, et le ferai en passant par des chemins imprévisible."10